“XYZ”
Para entender el origen de la Línea XYZ debemos remontarnos a enero de 1938. Las tropas Republicanas, con temperaturas que rondan los veinte grados bajo cero, consiguieron tomar Teruel. Tras largos días de combates las tropas sublevadas se ven obligadas a deponer las armas. De la derrota del bando sublevado, a la euforia del bando republicano, que veía en esta victoria una de las pocas que conseguiría durante la Guerra Civil. La derrota supuso un golpe psicológico a la personalidad de Franco. El general gallego, desoyendo a sus asesores, que le repetían que olvidase una capital de provincia sin importancia estratégica, lanzó una ofensiva, apenas diez días después de la toma republicana, para reconquistar la ciudad. Las tropas republicanas no consiguieron resistir el avance del bando sublevado, apoyado constantemente por una lluvia de obuses. Finalmente fueron derrotadas el 22 de febrero de 1938. Franco se hacía con Teruel y destrozaba la moral republicana.
A partir de ese momento se abría un nuevo escenario. Tras apoderarse de Teruel, al bando sublevado se le presentó la oportunidad de poner fin a la guerra y asestar el golpe definitivo a una República ya herida de muerte. Hasta el momento los batallones italianos del Corpo di Truppe Voluntarie habían jugado un papel secundario en la guerra, provocando la insatisfacción del propio Mussolini, que barajó la posibilidad de retirar sus tropas de la Península. Franco, sabedor del potencial bélico de las tropas italianas, decidió otorgarles el papel principal en la ofensiva sobre Valencia. La estrategia estaba clara, se llevaría a cabo lo que posteriormente se conocerá como “guerra celere”, concentrar los ataques en puntos concretos, conseguir romper la línea y realizar una penetración profunda, todo ello con el apoyo constante de la artillería y la aviación. Finalmente, una vez se hayan roto las líneas, la infantería, protegida por blindados y tanques, penetraría y se haría con el control del territorio.
El alto mando Militar Republicano, viendo a sus tropas en desbandada por la carretera de Sagunto, perseguidas muy de cerca por las tropas sublevadas, decidió tomar cartas en el asunto y crear una línea de defensa para evitar que las tropas sublevadas llegaran a Valencia. Leopoldo Menéndez, general del ejército Republicano, sentó las bases de la defensa. Se debía resistir, creando varias líneas defensivas, para que en el caso de que el enemigo rompiera la línea, poder realizar un repliegue de forma ordenada, y seguir resistiendo en una línea posterior sin perder prácticamente terreno. Se fueron creando varias líneas defensivas, y en la búsqueda de la línea definitiva, se eligió nuestra comarca como lugar geográfico más favorable. La planificación de esta línea quedaba en manos del coronel Ardid Rey, que ya había creado una línea defensiva en torno a Madrid, y la construcción directamente a la Agrupación de Ejércitos del Centro, bajo el mando del General Manuel Matallana. Se iba a crear así la conocida “Línea XYZ”, que iría desde Almenara, pasando por la Sierra Espadán, cruzando por la cabecera del rio Palancia, alcanzando la Sierra de Javalambre, hasta llegar a Santa Cruz de Moya, ya en la provincia de Cuenca.
La construcción de la línea constó de tres etapas. La primera se inicia en abril de 1938 y finaliza en junio del mismo año, en la que se construyeron los grandes centros de resistencia, aun sin unión entre ellos, creando la espina dorsal del sistema defensivo final, pero sin llegarse a producir la ocupación de las mismas. La segunda etapa se inicia en el momento que se ocupan las trincheras, quedando conformadas por dos Cuerpos de Ejército (el A y el B), creados exclusivamente para la defensa de la línea, nutriéndose también de las tropas que se iban replegando huyendo del empuje del bando sublevado. Quedaban así enfrentados, por primera vez en territorio del Palancia, ambos bandos. El 25 de julio tras el estallido de la Batalla del Ebro, todas las miradas se fijaron en ambas orillas del rio. La línea “XYZ” pierde su intensidad, produciéndose una calma tensa, que ambos bandos aprovechan para realizar trabajos de fortificación y rellenar el esqueleto defensivo. En la tercera y última etapa, el peligro de reanudación de las hostilidades era prácticamente nulo, pero la tensión aún estaba presente, produciéndose, en ocasiones puntuales, pequeñas escaramuzas. Es en este momento cuando se consolida la línea defensiva.
Los bombardeos en Jérica se iniciaron el 18 de julio de 1938, duraron cinco días, y obligaron a los habitantes a abandonar la localidad.
Fueron meses intensos. Las tropas sublevadas chocaron contra lo inesperado, un cinturón defensivo que logró frenar su avance.
Tras la escisión dentro del bando Republicano y la posterior rendición sin condiciones de este, la guerra finalizará el 1 de abril de 1939. Había caído el Gobierno de la República, y con él, la desintegración de su ejército. Los soldados que un día ocuparon la línea huyeron, o simplemente volvieron a sus casas…
La línea “XYZ” ha prevalecido oculta en las laderas de nuestra comarca hasta el presente. Hoy conforma un interesante paisaje que permite ver y entender nuestro pasado, como así lo entendió Gonçal Castelló, oficial del Estado Mayor republicano que al llegar al puesto de mando para hacer frente a las tropas italianas del bando sublevado preguntó a qué se debía aquel nombre. El jefe de operaciones Francisco Ciutat le respondió con cierta ironía: “XYZ, cuenta chico y verás que son las últimas letras del abecedario, ¡detrás no hay nada más!”.
Los primeros vecinos que volvieron a Jérica tras la Guerra se encontraron con un pueblo derruido y lleno de escombros.
Y estas son las trincheras que en esta carrera vais a recorrer.
Autor: Ricardo Mesado Montesinos